Cada persona conecta más intensamente con uno de los cinco elementos: fuego, tierra, aire, agua o espíritu. Este se denomina "elemento de poder". En este post, te explicamos las características de cada uno de los elementos y su impacto en los signos del zodiaco.
Fuego: El elemento de la claridad
El fuego simboliza nuestras pasiones y la claridad que nos permite ver en la oscuridad. Este elemento está ligado a la transformación, la creatividad, el entusiasmo y la vitalidad. Su energía es rápida y volátil. Los signos de fuego (Aries, Leo, Sagitario) son decididos, intuitivos y con una gran energía expansiva, aunque tienden a ignorar los detalles pequeños.
Tierra: El elemento sólido
El elemento tierra, tanto en lo físico como en lo mágico, está relacionado con la estabilidad y la permanencia. Es el símbolo de la seguridad y la resistencia. Su energía se mueve lentamente, pero de forma constante. Los signos de tierra (Tauro, Virgo, Capricornio) valoran lo tangible, lo material y las estructuras firmes, ya que dependen de la estabilidad para sentirse seguros.
Aire: El elemento esquivo
Aire es el más intangible de los elementos, representando la flexibilidad, el intelecto y el desapego. Su energía se mueve rápidamente y se adapta con facilidad. Los signos de aire (Géminis, Libra, Acuario) son pensadores profundos, apasionados por el conocimiento y la comunicación. Valoran los intercambios de ideas y entienden fácilmente diferentes puntos de vista.
Agua: El elemento del movimiento
El agua es esencial para la vida y está asociada con el cambio, la purificación y las emociones. Su energía es fluida y transformadora. Los signos de agua (Cáncer, Escorpio, Piscis) son profundamente emocionales, intuitivos y se conectan con los demás a través de sentimientos intensos. Perciben el mundo a través de sus emociones más que de la lógica.
Espíritu: El quinto elemento
El espíritu es un elemento que conecta los otros cuatro elementos y es fuente de energía para la magia. No puede percibirse de manera física, sino a través de nuestros sentidos espirituales, siendo la clave para realizar una verdadera conexión con lo espiritual y trascendental.